"Bestias al fin y al cabo."
Yo soy, o era (ya ni sé), creyente en eso del amor verdadero, del real, del que no tiene comparación a ninguna otra experiencia, que te demuestra el significado de esta palabra, esa alma gemela, esa otra mitad que después de encontrarla se queda para siempre. Hay otras que creen, que el para siempre no existe, ni dicho amor eterno, que se viven solo varios amores por algún tiempo, hasta que por regla, se acabe el sentimiento y se pase a vivir lo mismo con el siguiente. Yo me he negado tanto a esta segunda teorÃa…, pero hoy creo que podrÃa ser posible vivir de varios amores que cada cual en su momento y a su manera nos haga felices. ¿Qué por qué? Creo que por ella. SÃ, la conocà y me enseñó que el amor y la felicidad eran tan opuestos a lo que yo creÃa y buscaba, que iban más allá, pero… todas las certezas, las alegrÃas y el sentimiento de que no habÃa nadie más en el universo que pudiera ni lejanamente captar mi atención, bueno, eso ya no es tan asÃ. Y comienzo a creer, que el ser humano por naturaleza, por torpeza, no sabe valorar ni cuidar el amor como algo tan mágico como es, por eso, aunque sea tu alma gemela, quien lleva toda su vida esperándote, buscándote, llorándote en las noches a solas, clamando tu presencia, termina por destrozarla, por destrozarse mutuamente, porque al final eso somos, torpes animales que no respetan la maravilla de las cosas…
Como simples mortales que somos, cual rey Midas con su oro, convertimos nos basta un solo toque para convertir: en efÃmero lo eterno.